Ordenar la memoria para expresar lo que motivó mis respuestas me ha llevado a darle nuevo valor a viejas expectativas renovando su sentido y haciéndome ver que lo que yo he vivido puede hacer pensar a otros.
Así que tomo yo entonces la palabra para hablar de lo que he hecho sin guardar falsa distancia, teniendo siempre el cuidado de no decir con toda claridad lo que no me gusta (que lo hay, por supuesto) para no cargar con mis escrúpulos al observador, dejándome entonces espacio para incluir en el recuento tanto lo que me satisface como lo que me gusta menos.
No tengo claro cuan útiles puedan ser para los jóvenes arquitectos de estas regiones europeas tan regidas por la historia, la publicación de cosas que son prometedoras en vista previa e imperfectas cuando pudieron construirse. Sé que hoy en Venezuela la supervivencia lo empaña todo y es difícil esperar atención, lo cual agrava lo de nemo propheta in patria.
Texto: Oscar Tenreiro
Folleto de la exposición:
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